CICLO B


1ra lectura: Isaías 60, 1 – 6

Salmo: 71

2da lectura: Efesios 3, 2 – 3a.5 – 6

Evangelio: Mateo 2, 1 – 12


 

AL VER LA ESTRELLA, SE LLENARON DE INMENSA ALEGRÍA


          Hoy la Iglesia celebra la Epifanía del Señor. Esta solemnidad recuerda la manifestación de Cristo al mundo como aurora resplandeciente en medio de la oscuridad. Él está aquí para todo hombre de buena voluntad que le acoge con un corazón sencillo. La presencia de los reyes  magos con sus regalos, personajes foráneos, en el pesebre de Belén muestra la universalidad de su venida. La estrella que guía a estos personajes simboliza la llamada que Dios hace a cada hombre de modo particular. La respuesta de los  magos es una invitación a responder también a las manifestaciones del Señor en la vida de cada uno, a no desatender las diversas estrellas que el Señor envía en el trascurso de la vida. Así como en los magos la respuesta personal no debe tardar. Los regalos oro, incienso y mirra simbolizan todo aquello de valor que cada uno  pueda ofrecerle al Señor.  La fiesta de la Epifanía compromete a todo creyente a ser instrumento de manifestación del Señor, en una búsqueda constante de las diversas estrellas, que nunca faltan,  que pueden llevar a un encuentro con el Señor.

SEÑOR, AYÚDAME A ENCONTRAR LA ESTRELLA QUE ME LLEVE HACIA TI.

P. Víctor