LLAMADOS A LA FELICIDAD

Sé feliz realizando tus sueños. Atrévete a poner fechas; traza metas y pasos a seguir, de modo que puedas organizar acciones concretas para realizar tus sueños. Es muy sencillo ¿verdad?

Cuando se rompen los apegos comienza a surgir la libertad. La persona libre siempre es feliz.

Si quieres ser feliz recuerda que el perdón mas que afectivo es efectivo. El perdón no puede estar supeditado a los sentimientos, el perdón es consecuencia de la voluntad. Yo perdono a alguien porque tengo la voluntad de perdonar, no porque tenga ganas de perdonar.

En tus faenas cotidianas haz lo que tienes que hacer con paz y alegría. Lo que no salga como tú quisieras inténtalo nuevamente, pero con fe, sabiendo que el Señor todo lo procura para tu bien. Con fe, esperanza y mucha paciencia se logra todo.  Por allí encontré este párrafo que te puede ayudar: Lo fácil ya lo hice, lo difícil lo estoy haciendo y lo imposible sé que con Dios lo voy a lograr.

Sé feliz. Tu felicidad tiene que notarse en el rostro. No llenes tu mochila con cargas inútiles que te esclavizan, llénala de todo aquello que te da felicidad y libera. Tú has sido creado para ser libre. Disfruta de tu libertad. Estas frases me llegaron al facebook, te pueden interesar: Lo que no dejas ir LO CARGAS, lo que cargas TE PESA, y lo que te pesa TE HUNDE. Practica el arte de SOLTAR, PERDONAR y DEJAR IR.

Para ser feliz: Dedica tiempo para entrar en ti y descubre los paisajes que te conforman. Esto debe ser tarea constante. Luego, reconoce y contempla la obra de arte que tu eres. Ojo, no te olvides de agradecer a Dios por haberte hecho regalo para los que te rodean. Además, dispón un diario en el que siempre coloques algo bonito de ti.

Por allí encontré una figura que tiene mucho mensaje para ti. Te la recomiendo y, a ponerla en práctica. Dice lo siguiente: Aprendí que no es trabajo de nadie sino mío, el cuidar de mí y hacerme feliz.

La felicidad depende más que nada de actitudes frente a la vida. No te olvides que ser feliz no se trata de no tener problemas cuanto sí de saber enfrentar esos problemas. Es decir, de las actitudes frente a esos problemas.

En las relaciones con los demás, sobre todo en el trabajo, ya es hora que  vayas dando pasos hacia la felicidad. Estas frases, que por allí las encontré, te pueden orientar: Llegar juntos es el principio, mantenerse juntos es el progreso y trabajar juntos es el éxito (Henry Ford). En la vida hay que dialogar, conversar, ponerse de acuerdo y tantas veces hay que ceder. Así se superan los malos entendidos y se logra la armonía. El beneficio es de todos. Sé feliz.

Si quieres ser feliz aprende a compartir lo mucho o poco que tengas; pero comparte.

Si quieres ser feliz te sugiero que reflexiones sobre la vivencia de valores en tu vida. Reflexiona en cada uno: ¿Cómo va la vivencia de la honestidad? ¿Eres honesto en tu trabajo, con tu familia, con tus amigos? ¿Eres confiable? ¡Sé feliz! ¡Comienza ya!

Eh, ¿Quieres ser feliz? Por allí encontré estas frases: Date cuenta que las personas felices no pierden el tiempo haciendo el mal a los demás. La maldad es cosa de gente infeliz, frustrada, mediocre y envidiosa. Estoy seguro que te ayudarán.

Así como al cuerpo debemos asearlo, lo mismo con el alma. La persona feliz siempre tiene el alma desintoxicada. Por allí encontré esto, posiblemente ya lo sepas, pero no está demás recordarlo. Te ayudará en tu camino para ser feliz: Agradece a primera hora; restringe malos pensamientos, pensamientos y comentarios; comparte y ayuda en lo que puedas; medita diariamente; actúa con compasión y amor; sé consciente de tus acciones; perdona de corazón.

Estos consejos los encontré en facebook y me parecieron geniales. Intenta ponerlos en marcha. No te esmeres en hacer todo a la vez, de a pocos llegarás lejos. Copialos: Uno, ámate a tí mismo; dos, haz el bien; tres, aprende a perdonar; cuatro, no hagas daño; cinco, sé positivo. Anda, sé feliz.

¿Quieres ser feliz? Disfruta de las cosas sencillas que la vida te presenta. No permitas que la costumbre te arrebate el brillo de tu vida diaria.

Tus pequeños detalles para los demás pueden ser motivo de alegría para alguién. Así, tu pequeño detalle será un gran detalle. Nunca te canses de ser detallista.

¡Hombre! Que no te desanime una caída. Caídas siempre habrán. Preocúpate por levantarte siempre que caigas. Cuidado te encariñes con lo que tropiezas y ya no te levantes.

 Si quieres ser feliz, ya tienes trabajo. Analiza tu vida, lo que encuentres de tóxico elimínalo. Ya es tiempo que desmanteles todo lo que te hace daño. Y, ojo, cuidado con las personas tóxicas: egocéntricas, negativas, envidiosas, las que siempre son víctimas, soberbias, descalificadoras.

La felicidad es el premio para todo aquel que la busca.

Amar y servir son vocaciones propias del ser humano. Quien las vive es feliz. Pero, éstas se expresan, básicamente, en cuatro vocaciones concretas que se traducen, cada una, en un estilo de vida propio: soltería, matrimonio, vida religiosa y vida sacerdotal. Cada uno las vive según su vocación. ¡Descubre tu vocación y vívela! Sé feliz.

Para ser feliz debes comenzar a desmalezar tu corazón. La buena semilla de valores y principios difícilmente crecerá en un terreno con mala hierba. Ten cuidado con la envidia, el rencor, los celos, los complejos, los malos recuerdos, entre tantos. Esta semana dedícate al arduo trabajo del deshierbo personal. Sé feliz.

La perseverancia para lograr tus objetivos, pese a los fracasos, te lleva al éxito. La persona perseverante es segura en su actuar. Por allí leí esta frase: Perseverancia… combustible para la realización de todos los sueños. Sé feliz

Las metas que tú te has propuesto no puedes dejarlas. Si son buenas no puedes renunciar a ellas. Los obstáculos y dificultades para lograrlas pueden superarse, ellos deben ser un reto para ti. Cuando no estás convencido de lo que quieres ellos son excusas para ya no continuar. No te olvides que el que quiere, siempre puede.

“A grandes metas, grandes sacrificios” Si tus metas y objetivos son claros, y son para tu bien y el de los demás, entonces manos a la obra. Que nada te detenga, ni tú mismo. El “qué dirán”, tu “zona de confort”, “personas negativas” tratarán de desanimarte. ¡Sé feliz! ¡arriesga!

¿Qué metas tienes en la vida? Sin ellas no tienes un rumbo y no sabes qué camino tomar. Una meta concreta te obliga a cumplir objetivos. Orienta tu existencia. No seas una veleta. Sé feliz.